Una parte allí y otra aquí.
Hoy, hace 5 años, llegué aquí. ¡Qué locura! Aún recuerdo la sensación que tenía ese día; la noche anterior había dormido muy poco. Me acosté llorando y temblando. Tenía muchísimo miedo. Pregunté en voz alta si estaba cometiendo un error. Estaba dejando todo lo que conocía y amaba, lo estaba cambiando por aventura, lugares nuevos. Lo estaba cambiando por algo diferente. Ni siquiera sabía si era seguro, si iba a ser mejor o peor que lo que ya tenía. Dejé todo por algo incierto y aquí estoy. Dejé la ropa lista, la maleta hecha, casi a reventar, porque me estaba llevando la vida a otro lugar. Llegamos al aeropuerto y cada segundo que pasaba se hacía más y más real. Me estaba yendo y no sabía cuándo iba a volver. En ese momento, pensaba que podría ser un año. Spoiler alert: no fue el caso. En mi casa, nunca fuimos como esas familias que se besan y se abrazan, que se toman de las manos y se hacen mimitos. No. En mi casa, los actos de cariño eran otros. Eran compartir un espacio en la t...